Si buscas una ruta de senderismo que combine historia, naturaleza y vistas espectaculares, este recorrido en Rasquera te encantará. Desde el núcleo urbano, ascenderemos hasta Coll de Pins, pasando por miradores con panorámicas impresionantes y vestigios de la Batalla del Ebro. Atraviesa bosques frondosos, crestas desafiantes y puntos emblemáticos antes de regresar al pueblo tras una experiencia inolvidable en la montaña.
La ruta ha sido catalogada como difícil debido a algunos tramos de sendero con orientación compleja y otros que, aunque no presentan una dificultad extrema, sí son algo expuestos. En estos puntos, será fundamental extremar las precauciones y prestar especial atención a los hitos colocados por los senderistas para guiar el camino.
Datos técnicos
Acceso con Google Maps
Descripción
Iniciaremos esta fascinante ruta en el pintoresco pueblo de Rasquera, accediendo a la Ermita de Sant Domènech por la calle de la Rasa. En el camino, pasaremos junto al monumento del Sagrat Cor, y en pocos metros llegaremos a la Ermita, donde comienza nuestro ascenso.
Justo detrás del templo, encontramos el sendero que nos conducirá al Coll de Pins y al observatorio Lister, con paneles informativos que nos guían en la travesía. La subida es pronunciada, y pronto alcanzamos el Tossalet del Cànter, un magnífico mirador desde el cual se pueden contemplar Rasquera y las imponentes sierras de Tivissa y Pandols.
Avanzamos hacia el Coll de Pins, donde se sitúa un punto geodésico y los restos del observatorio Lister, un pequeño refugio y trinchera utilizado como observatorio republicano en la Batalla del Ebro. Siguiendo la cresta, cruzamos el Coll dels Rojals y la Punta de Terracuques, hasta llegar a los vestigios de la Masía de Garruspo. Desde aquí, atravesamos la era para conectar con el sendero que nos lleva a la frondosa Obaga de les Llacunes.
A través de una zona boscosa, nos dirigimos hacia la loma que nos conduce a la cima de les Picóssies, punto culminante de la ruta. Iniciamos el descenso en dirección sur hasta el Coll de la Barca, donde el sendero poco transitado puede llevar a la desorientación; en este tramo, es esencial prestar atención a los hitos.
Atravesamos una cornisa algo expuesta bajo la Roca de la Barca y seguimos por la cresta hasta un pequeño collado, donde encontramos una lengua rocosa que desciende abruptamente hasta el Portell de Cosp, con un característico pino grande y una encina juntas como referencia. Desde aquí, tomamos el camino de la izquierda para descender a la Bassa de Cosp y la Font de Múrria, donde el sendero termina y comienza la pista del Camí de Monredons.
Tras recorrer unos 800 metros, llegamos a un cruce y tomamos la pista de la izquierda, pasando junto al Mas de Gerro. Continuamos hasta el Mas del Cosp de Torné, donde dejamos la pista en una curva y seguimos por el antiguo Camí Vell de Cosp, que nos lleva hasta una gran balsa de agua y el Mas de Fieti.
Desde aquí, seguimos por la pista hasta la Plana de Manxol, donde tomamos el camino de la izquierda y descendemos al Barranco de la Pedraleta. En este tramo, encontraremos algunos cruces, pero siempre debemos seguir el Camí dels Frares hasta llegar a la carretera TV-3022, que tomaremos a la izquierda. En pocos metros, divisamos las primeras casas de Rasquera, punto final de nuestra emocionante ruta.
Importante:
Caminar por las montañas puede ser una actividad peligrosa en función del perfil de la ruta, es aconsejable tener un mínimo de experiencia y saber planificar bien la actividad antes de salir.
Cada uno es responsable de sus decisiones, sus acciones y su seguridad.
Este itinerario se proporciona sólo con fines informativos y no implica en modo alguno la responsabilidad del autor.
Advertencias:
La ruta ha sido catalogada como difícil debido a algunos tramos de sendero con orientación compleja y otros que, aunque no presentan una dificultad extrema, sí son algo expuestos. En estos puntos, será fundamental extremar las precauciones y prestar especial atención a los hitos colocados por los senderistas para guiar el camino.